El chamán sabe que no hay nada inmutable,
así que el chamán no creé en las leyes escritas.
Cada caso exige un juicio determinado.
Los dioses no le dieron unas tablas con las leyes.
Los dioses le dieron la razón y su intuición
para decidir lo que es justo y lo que no,
quien merece un castigo y quien merece el perdón.
hOLA, te encontre.. me encanta el blog..
ResponderEliminarun abrazo.
gracias
ResponderEliminarun abrazo amiga